Tras finalizar el 2021 contagiándonos del Covid, el 2022 fue una vuelta a la vida en toda regla.
Había tres objetivos en el horizonte; Maratón de Madrid, Behobia y San Silvestre Vallecana.
Se consiguieron los 3 pero de manera sufrida.
El entrenamiento para el Maratón de Madrid estuvo lleno de interrupciones por virus varios de guardería de Violeta y noches dificiles. Pero contra todo pronóstico y con la absolutamente decisiva ayuda de mis compañero/as de entrenamiento en Tigers Running Club, conseguí realizar el test y finalizar el maratón un año mas con éxito, el tercero en Madrid y el séptimo en total.
Fue absolutamente eṕico llegar a la meta en compañía de mi inestimable compañero de kilómetros Juan.
Tras unos meses de merecido descanso llegó la Behobia y esta vez sí, Emma la pudo correr. Corrimos juntos toda la carrera en lo que para ella era la vuelta a la vida deportiva tras ser mamá. Una guerrera que siempre lucha contra todo.
La novena Behobia consecutiva finalizaba.
Y gracias a dios pudimos acabar esta vez sí, el año corriendo la San Silvestre Vallecana también juntos para dar gracias por la vida.
