En efecto el 25 de Febrero completé el que ya es mi cuarto maratón tras Barcelona (2015), Madrid (2016) y Praga (2017).
Una preparación irregular ha propiciado que haya acabado corto de km y fuerza en las piernas y haya vuelto a resentirme de la fascia lata (la maldita cintilla de siempre) y haya sufrido bastante dolor en esa zona desde el km 30 hasta el final.
El objetivo era acabar en tres horas y media y a este ritmo iba hasta ese fatídico km 30 donde ha vuelto a aparecer el dichoso dolor. Acabé por el oficio que da haber hecho 3 maratones anteriormente y saber aguantar ese dolor, conocer la lesión y saber gestionar la mente…
Tengo cristalino que no vuelvo a correr un maratón si no he realizado el plan de entrenamiento casi en su totalidad…
Aún así arropado por mis compañeros de Tigers Running Club pasé un fin de semana maravilloso en la ciudad de Sevilla, donde además tengo familia muy querida viviendo allí con la que pude compartir un par de buenos momentos.
La carrera me encantó, muy bien organizada (esa categoría oro como carrera está ganada a pulso) con un recorrido bonito, buen público e inmejorables compañeros de carrera.
Que distinto sería si corriera solo….
La emoción que sentí al entrar al estadio de La Cartuja y enfilar la pista que te lleva a la meta es indescriptible, máxime con el dolor que tuve que aguantar…
Me acordé mucho de todos aquellos que entrenaron duro para llegar a la salida de la carrera y no pudieron llegar… Por vosotros.
Os dejo un vídeo resumen y las fotos que lo atestiguan.
Mil gracias a todos los que habéis estado a mi lado durante estos difíciles meses a nivel profesional y personal y habéis hecho posible que cruce esa meta…