Porque hace un mes participé en el que ha sido mi tercer medio maratón de montaña (22 km) en la querida tierra de Candeleda en la Sierra de Gredos.
Es una carrera que me tiene enamorado por su circuito, pueblo, gente, voluntarios, organizadores, compañeros de carrera…
Es un fin de semana maravilloso. Empezando por el alojamiento. Una casa dentro de una finca a las afueras de Candeleda que fue genial, piscina incluida y en medio de un remanso de paz.
Fui como siempre acompañado por mi querido grupo y ya familia de los Tigers Running Club los cuales fuimos a apoyar la carrera que con tanto mimo y cariño prepara nuestro entrenador Alberto. Se hace de querer el maldito.
La carrera como siempre estuvo muy bien organizada, con apoyo de voluntarios en todo momento, trazado perfectamente señalizado y esta vez el tiempo acompañó.
A pesar de la poca preparación verano mediante, acabé la carrera sin ningún problema y mas convencido de nunca del siguiente gran reto para el 2018…
Culminamos el fin de semana con las fiestas de Candeleda, dentro de un gran recinto con escenario y buena música electrónica y un baño en las piscinas naturales.
Habrá cuarto Guerrero de Gredos sin duda alguna.